Desde mediados de octubre, se ha observado un importante aumento en el número de casos de enfermedades respiratorias similares a la gripe en el norte de China. Este incremento es considerablemente mayor en comparación con los registros de los tres años anteriores durante el mismo período de tiempo.

El 21 de noviembre, distintos medios de comunicación y el sistema de alerta temprana ProMED señalaron la aparición de brotes de neumonía en niños de esta región, cuya causa aún no ha sido identificada. ProMED es un sistema de seguimiento que supervisa los brotes de enfermedades tanto en humanos como en animales a nivel mundial.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha expresado dudas acerca de si estos brotes de neumonía están relacionados con el aumento general de infecciones respiratorias previamente informado por las autoridades sanitarias chinas, o si se trata de eventos aislados sin ninguna conexión directa.

En urbes como Pekín y Liaoning, los centros de salud se están enfrentando a una avalancha de niños enfermos, alcanzando una situación crítica que está llevando a considerar la suspensión de las clases escolares.
Las familias, en busca de cuidados médicos, se encuentran formando interminables filas, que frecuentemente llegan a durar dos horas, tanto en hospitales convencionales como en centros de medicina tradicional china.

Según el comunicado de ProMED, los infantes afectados presentan una sintomatología específica: no exhiben signos como la tos y son mayormente asintomáticos, salvo por fiebres elevadas.

Además, se ha observado que pueden desarrollar nódulos en los pulmones.

En Liaoning, ya se han registrado casos en los cuales docentes han sido contagiados por sus estudiantes, lo cual ha conllevado a que, en la práctica, algunas instituciones educativas ya hayan interrumpido sus actividades académicas.

La comunidad internacional ha reconocido que China cuenta con recursos para detectar y comunicar enfermedades emergentes, como se vio en la pandemia de COVID-19. Sin embargo, también ha quedado claro que hay una falta de transparencia. Desde entonces, China ha intentado demostrar un mayor compromiso con la vigilancia y fortalecer su sistema de salud.

La OMS ha solicitado información detallada a China sobre el aumento de enfermedades respiratorias y casos específicos de neumonías en menores. Hasta ahora, no se ha recibido una explicación clara de si estos brotes son parte del aumento general de enfermedades respiratorias informadas recientemente o si son un evento independiente.
Según la experta de la OMS, Krutika Kupalli, es esencial recopilar más información para comprender lo que está sucediendo. Podría estar relacionado con Mycoplasma, RSV, COVID-19 o la gripe.

La misma entidad ha emitido recomendaciones para reducir el contagio, como vacunarse contra la gripe, mantener distancia, realizar pruebas, usar mascarillas, ventilar espacios y practicar una higiene de manos rigurosa.